El anís es tónico , digestivo, carminativo y antiflatulento. Solo o combinado con otros hierbas, actúa contra el asma y la bronquitis, estimula las secreciones de los bronquios, del Estómago, del intestino y de las glándulas mamarias (galactogeno); combate los gases intestinales y calma los cólicos
Para ayudar a expectorar en casos de tos y catarros intestinales y bronquiales, es excelente el efecto de las inhalaciones de vapor si se agregan semillas de anís al agua caliente.
Los semillas, o su destilado, están indicadas para estimular la producción de leche en las mujeres que amamantan. También conviene a las mujeres embarazadas para facilitar el parto. El polvo de anís que se obtiene triturando la semilla, combate el insomnio.
Tanto el Anís verde como el anís estrellado, Facilitan la expulsión de los gases, resulta muy útil en casos de digestiones pesadas y flatulencia (exceso de gases). Se recomienda tomar la infusión de anís de 2 a 3 tazas diarias después de las comidas para estimular la digestión
El anís estrellado contiene el mismo principio activo que el anís verde o común, una esencia rica en atenol, por lo que sus propiedades son similares.
En dolores de vientre y cólicos se fricciona el vientre de los niños y adultos con aceite de anís; lo mismo se hace en los dolores de cabeza.
Contra el escorbuto se toman, cada 2 horas, 2 gotas de aceite de anís en una cucharadita de agua.
La tisana de anís, bebida y al propio tiempo aplicada externa mente en forma de lociones, ficciones y baños, fortifica los nervios,
El anís estrellado es más concentrado que el anís verde por lo que 2 o 3 frutos por taza son suficientes para preparar las infusiones. La dosis recomendada es de 2 a 4 tazas al día. Esta dosis no debe excederse. El anís es una planta muy recomendable, pero no debe abusarse de ella.
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